Cómo conservar los huevos en casa.

Los huevos microbiológicamente hablando son un alimento de alto riesgo. Probablemente el huevo es uno de los alimentos que más intoxicaciones provoca en el hogar y generalmente son intoxicaciones que se podrían evitar con una buena manipulación y conservación de los huevos.

Cuando compramos los huevos se encuentran a temperatura ambiente para evitar los contrastes de temperatura que pueden provocar cierta condensación en los envases. Esa condensación produce pequeñas gotas de agua que pueden favorecer la entrada de microorganismos al interior del huevo donde tienen unas buenas condiciones para su crecimiento. Es importante saber que la cáscara del huevo es porosa.

Cuando llegamos a casa sin embargo, los huevos se deben conservar en refrigeración, a ser posible en su envase original y por supuesto sin lavar. Ya he comentado lo que puede ocurrir si se moja la cáscara del huevo.

Por lo general los frigoríficos suelen tener una zona para almacenar los huevos en la puerta pero es mejor conservarlos en una balda ya que se mantienen más estables la temperaturas. En la puerta hay más fluctuaciones de temperatura.

¿Cuál es la vida útil de los huevos?

La vida útil de los huevos sin refrigerar es de una semana a diez días. Si no se refrigeran se deben conservar a temperatura fresca y constante.

Para evitar problemas se deben refrigerar los huevos para conservarlos en casa. Los huevos refrigerados tienen una duración de entre 30 y 45 días. Los huevos al menos en España llevan fecha de consumo preferente, no fecha de caducidad.

El huevo nutricionalmente hablando es un alimento muy interesante ya que contiene proteínas de alto valor biológico. Durante mucho tiempo han tenido mala fama por su alto contenido en grasas, especialmente colesterol aunque más recientemente se ha visto que no afecta al nivel de colesterol sanguíneo.